viernes, 6 de julio de 2007

En Puebla, 32 cuerpos rescatados; los gobiernos se culpan

La tragedia ocasionada por el derrumbe de un cerro en el municipio de Eloxochitlán --que sepultó al menos a 45 personas--, derivó en una disputa entre los gobiernos federal, estatal y municipal, que buscan deslindarse de responsabilidades ante un presunto caso de negligencia.
Luego de que las autoridades municipales acusaron al gobierno estatal de ignorar sus advertencias sobre el inminente desgajamiento del cerro, la administración presidida por Mario Marín Torres señaló que el gobierno federal es el responsable del mantenimiento de las carreteras en la Sierra Negra, donde ocurrió el desastre.
Desde que se supo del derrumbe, las autoridades de Eloxochitlán revelaron que habían notificado al gobierno del estado sobre el peligro de un alud.
Remberto González Arriaga, representante de la Comuna, dijo que hace semanas había advertido al secretario de Comunicaciones y Transportes, Rómulo Arredondo Gutiérrez, sobre el peligro de un deslave.
Esta versión fue ratificada hoy por el edil auxiliar de Zacacopan, Armando González Arriega, quien afirmó que el gobierno estatal tenía conocimiento del peligro en la zona: "Sería una mentira de las autoridades de Puebla decir que no conocían el problema; ahora que asuman su responsabilidad”, dijo.
La primera reacción de Marín Torres fue de enojo: “Yo quisiera que alguien me dijera a quién culpamos por el desprendimiento del cerro”.
Inclusive, en una entrevista concedida ayer desde su casa a Televisa Puebla, Marín cuestionó a las autoridades municipales: “¿Acaso nosotros mandamos el agua?”.
Y mientras, la prensa internacional y noticiarios nacionales trasmitían la tragedia en directo, Marín presidía ceremonias de término del ciclo escolar de los centros escolares “José María Morelos y Pavón” y “Manuel Espinosa Yglesias”.
Los cuestionamientos sobre la responsabilidad del gobierno en la tragedia continuaron. Fue entonces cuando Arredondo Gutiérrez acusó a la federación de negligencia. Argumentó que existía un acuerdo que consistía en que el gobierno federal daría mantenimiento a los caminos de la Sierra Negra y el estatal a la Sierra Norte.
Esta versión fue secundada por el diputado federal del PRI, Mario Mendoza Cortés, quien señaló que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes federal es la única responsable del mantenimiento a las vialidades de la Sierra Negra.

Al respecto, el director del Centro SCT Puebla, Daniel Ortiz y
Caso, rechazó la existencia de dicho acuerdo y coincidió con la versión del gobernador, de que se trató de un desastre natural.
Durante el día, las labores de rescate fueron lentas. Hasta el cierre de esta edición se habían encontrado los cuerpos de 32 personas, aunque se estimaba que en el autobús viajaban al menos 45 pasajeros.

Cinco veracruzanos, entre las víctimas
Al menos cinco veracruzanos figuran entre los pasajeros que perdieron la vida sepultados por el alud registrado la mañana de ayer en el municipio de Eloxochitlán, Puebla, informó la Subsecretaría de Protección Civil del estado de Veracruz.
Los veracruzanos que murieron son: Oscar López Meza, de 35 años de edad, originario de Martínez de la Torre; Mario Lázaro Sánchez, de 36, oriundo de la comunidad Vaquería, municipio de Acultzingo; María Alejandra Castro Hernández, de 9 años, y María Magdalena Hernández Carrillo, de 45, vecinas de Tezonapa; y María Escobar Hernández, de 6 años, nativa de Córdoba.
El municipio poblano de Eloxochitlán colinda con Tehuipango, ubicado en las altas montañas de la sierra de Zongolica.
La Subsecretaría de Protección Civil, a través de un comunicado, señaló que el gobierno del estado se hará cargo de los gastos de traslado de las víctimas.
El mismo día del accidente, mencionó, el gobierno veracruzano envió personal de Protección Civil, una brigada médica y maquinaría pesada para auxiliar en las tareas de rescate de cuerpos y remoción de escombros.
En tanto, en Jalapa, esta mañana murió el trabajador de la empresa FUGSA, Nemesio Salazar, al producirse un alud de tierra cuando realizaba labores en una zanja de la calle Francisco González Bocanergra, de la colonia Plan de Ayala.
PROCESO

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